Crónicas de Mercado: Palmito o Flor de Izote

Por: Isis Samaniego

La semana pasada platicando con doña Mary, señora que ayuda en la casa de enfrente, le pregunté que si ella conocía la flor de izote; “¡ah cómo no! Claro que la conozco ayer me hice un texmole de esa florecita” me dijo tranquilamente. Le pregunté por qué no me había dicho, pues yo andaba en busca de la flor; con un movimiento de hombros me dijo: ¡mmm y yo que iba a saber que usted quería! Con mi cara de What? Me sonreí y le dije en tono bobo: sí verdad, no le había comentado que andaba buscando un palmito, pues bueno doña Mary, ahí le encargo una penquita ahora que vaya a su pueblo – y así quedamos.

Doña María es oriunda de Martínez de la Torre, Veracruz, pueblo que colinda con Misantla y San Rafael y hacia el oeste con el estado de Puebla; al tercer día que le pregunté, nos echamos más de media hora de charla y me comentaba que en su tierra y en Misantla, donde vive su mamá, la flor de izote es muy requerida en estas fechas: nosotros mandamos a los chamacos a espiar la palma, sabemos que florea entre julio y agosto- la gente que sabe prepararla siempre está al pendiente de los palmitos; porque hay que cortarla joven, si se corta recia ya es muy amarga y ¡zaz! De repente que saca un recipiente con el guiso, ¡listo para comer! Así como no va uno a querer a los vecinos…

En el pueblo de mi abuela (Huatusco), esta flor se prepara de varias formas, sin embargo una de las que más llamó la atención de mi paladar fue un omelette relleno de queso y flor de izote; claro habrán de saber que se corta el palmito se deshoja vara por vara, se cortan de preferencia las flores más tiernas y se les da un hervida con sal para que se les quite lo amargo.

Izote deriva de un vocablo náhuatl Izotl, es una flor de color blanco verdoso o blanco tirando al crema, de aspecto brillante, muy frágil y vistosa, producida por distintas variedades de yuca (yuca filifera, yuca elephanties, entre otras). Esta flor crece agrupada en racimos grandes y tupidos de forma cónica, llegan a medir de 30 a 80 cm en algunas plantas; el Izote puede llegar a medir entre 5 y un máximo de 10 metros; en la región de Veracruz son muy apreciadas y las podemos encontrar a la venta en los mercados populares, mucha gente las prepara de manera sencilla en tortitas de huevo. En Coahuila y Nuevo León se recogen del desierto para la época de cuaresma, en Guerrero las cuecen y las fríen con chorizo para taquear; en otros lugares como Hidalgo las combinan con guayaba para hacer un dulce llamado guayaizote, en Tamaulipas se cocinan solo con chile, cebolla y jitomate, muestra que en todo nuestro país cada pueblo tiene diversas formas de cocinar esta flor. Además con las fibras de esta planta antaño se hacían morrales, ondas y costales, hoy ya en desuso, aunque claro tendremos pronto que volver a poner los ojos en ella para dejar de hacer uso indiscriminado del plástico tan contaminante.

Sin embargo, sepan que la flor de izote es la Flor  Nacional de El Salvador; es una planta originaria de Mesoamérica, fue utilizada por los pueblos mayas en comidas y bebidas muchos años antes de la llegada de los europeos, su consumo y producción está extendido en América Central sobre todo en El Salvador y Guatemala. Es una planta arborescente de la familia de las agaváceas, se cultiva como planta de traspatio; las flores contienen ácido ascórbico, niacina y tiamina además tiene propiedades curativas en afecciones bronquiales, dolor de oídos, artritis, es buena para los diabéticos, en México es poco consumida y tiene distintos nombre según el estado o región donde se encuentre también se le conoce como Chochos, Flor de yuca, Palmito o flor de Palma, Cuaresmeña, Pitas, es una planta que tiene por lo menos 47 especies que se distribuyen de Centroamérica a Norteamérica.

El izote se reproduce tanto por semilla como de forma vegetativa a través de brotes, se han reportado ciertas especies que crecen velozmente de 3 a 10 cm por año, y debe de saber que para que floree, se necesitan muchos años. Así que si vamos al mercado en estas épocas, si tenemos suerte encontraremos Flores de Izote, detengámonos a comprar un montoncito de flor para comerlas revueltas con huevo que es la forma más simple y sencilla de degustarlas.

Fotografías: Portada y Foto 2 Isis Samaniego, Foto 1 Jesús Niño C., Foto 3 Jimmy Medina, Foto 4 Aaron Echols.

Isis Samaniego (Rio Blanco, Veracruz, sept/77). Estudió la maestría en Ciencias Sociales en la Universidad Autónoma de Tlaxcala, y Artes y Administración en la Universidad Veracruzana. Es miembro fundador de Ediciones Ají y miembro del colectivo Adictos a la Poesía de Xalapa, Veracruz. Ha publicado cuento y poesía en diversos medios. Su último libro, Jacaranda, fue editado por el Instituto Tecnológico Autónomo de México. Colabora con la Comunidad Slow Food  Guardianes de Sabores en Cholula.